En la antigüedad Delfos era el centro del mundo y hoy se ha transformado en una de las paradas obligatorias para los turistas que desean conocer la Antigua Grecia y disfrutar de este magnífico emplazamiento situado a 180 kilómetros al noroeste de la ciudad de Atenas.
En la actualidad quienes visitan la capital de Grecia también realizan una excursión a Delfos, el pequeño pueblo turístico al sur del famoso monte Parnaso, ofreciendo unas vistas increíbles tanto del valle como del mar.
Quienes visiten Delfos podrán adentrarse en la historia de esta antigua ciudad que en el pasado también atraía peregrinos que recorrían la región en busca de los consejos de la sacerdotisa Pitia, siendo el Oráculo de Delfos un espacio formado por mujeres mayores que según las leyendas tenían poderes heredados del Apolo.
Además de recorrer todo el pueblo de Delfos los turistas tienen la oportunidad de hacer compras en sus pintorescas tiendas y disfrutar de las maravillosas vistas panorámicas o visitar la zona arqueológica un gran emplazamiento donde se encontraba la antigua ciudad de Delfos y donde aún quedan ruinas del Templo de Apolo, el teatro y el estadio ubicado muy cerca del teatro y sede de los Juegos Píticos.
El Museo arqueológico de Delfos es considerado uno de los mejores de toda Grecia en su especialidad y guarda el objeto de mayor valor de la colección que es el Auriga de Delfos, una escultura de bronce realizada para conmemorar la victoria en los Juegos Píticos del año 478 a.C.
A Delfos es posible llegar en coche por carretera y combinar el viaje con una visita a Meteora y al Monasterio de Osiou Louka.
Desde Atenas es necesario tomar la autopista E75 con dirección Lamia y después la salida a Castro y Levadia, mientras que los que decidan ir en autobús encontrarán servicios con hasta seis frecuencias diarias que parten de la Terminal B