Una de las principales estaciones de esquí de los Alpes franceses más famosas es Chamonis, situada a 1100 kilómetros de altura y a los pies del fantástico Mont Blanc que no en vano es la montaña más alta de Europa Occidental con 4807 metros de altitud.
Así, rodeada de un idílico paisaje la localidad francesa de Chamonix cuenta con uno de los dominios esquiables más amplios de los Alpes y ofrece a los turistas un paisaje maravilloso de origen glaciar a solo 15 kilómetros de Italia tomando el tunel del Mont Blanc y a la misma distancia de Suiza por el puerto de Montets.
Pero además de los atractivos que siempre representan los paisajes montañosos y las posibilidades de practicar deportes de nieve, Chamonix posee el especial encanto de los pueblos de montaña con su tradicional arquitectura de bonitas casas, mercados pintorescos y una atmósfera acogedora y familiar.
Este bonito valle fue en 1924 el lugar elegido para llevar a cabo los Juegos Olímpicos de Invierno, un hecho que convirtió a Chamonix en un verdadero referente a nivel mundial para la práctica de deportes de nieve, con diversas atracciones entre las que se destaca el Mont Blanc, sus interminables pistas de esquí, magníficos glaciares como el de Bossons y el de Mer de Glace.
En las pistas de la estación de Chamnix además de la práctica de esquí alpino también puede hacer snorwboard y el esquí de fondo o de raqueta, mientras que otro tipo de actividades se presentan como alternativas excelentes para aquellos que no esquían como el Parc Animalier de Merlet donde es posible admirar ciervos, marmotas y gamuzas y otras muchas especies animales que viven en total libertad.
Pero Chamonix también cuenta con diferentes espacios dedicados al arte y la cultura como la Casa de la Memoria del Patrimonio, el Museo Alpino y el hermoso Museo de los Cristales, sin olvidar las propuestas gastronómicas que ofrecen los diferentes restaurante de la ciudad en los que no solo es posible degustar la excelente cocina francesa sino también internacional.
