Venecia ofrece desde hace siglos uno de los carnavales más famosos del mundo, el mismo que vivió su época de esplendor durante el siglo XVIII, época en que todos los participantes cubrían su rostro con una máscara.
También el disfraz tenía en la época un significado especial para el pueblo veneciano ya que según la costumbre los nobles llevando el rostro cubierto con una máscara tenían licencia para lanzarse a todo tipo de placeres.
Ya los sirvientes usaban los vestidos de los nobles y las damas, mezclándose así con la gente rica de la ciudad y hasta algunas figuras del clero gustaban de cambiar su identidad luciendo trajes de bestias o demonios.
El Carnaval de Venecia ya no es el mismo de antaño pero sigue siendo una atracción para los turistas que visitan la ciudad donde las máscaras más tradicionales siguen siendo las estrellas pos su diseño y belleza, que las ha hecho merecedoras de considerárselas como las más hermosas.
Las calles de Venecia se llenan de colorido en estos días y es posible disfrutar de espectáculos de teatro callejero, talleres de creatividad dirigidos a los más pequeños, invitando a los visitantes a ponerse una máscara y ser también protagonistas de la fiesta.
El Gran Teatro de la Plaza de San Marcos organiza cada año el concurso de la mejor máscara tradicional, con diversos desfiles donde los participantes lucen hermosos trajes, atabiados con pelucas y máscaras, todo ello inspirado en la época de mayor esplendor del carnaval veneciano.
Danzas tradicionales y degustaciones de gastronomía italiana forman parte de las propuestas para vivir cada uno de los días de fiesta, donde resurgen las leyendas más increíbles como la que cuenta la historia de un sacerdote que en 1760 vestido con una máscara para ir a ver la última comedia de Goldoni, olvidó su sotana y ésta fue utilizada por un gondolero que la utilizó para fines no precisamente religiosos.
Para los más jóvenes en los Jardines de la Bienal también se realiza una fiesta llamada Carnaval Internacional de los Jóvenes, un evento donde se mezclan la tradición y la creatividad.
Durante esta época del año el clima en Venecia es húmedo y frío pero nada impide caminar por la Plaza de San Marcos y Rialto donde tradicionalmente se realiza una procesión que concluye el último día de carnaval con un desfile de góndolas que navegan por el Gran Canal en un viaje de despedida hasta el próximo año.